El grupo de gobierno rehusó elaborar un programa municipal de prevención de la ludopatía entre la juventud.
Lanzarote En Pie presentó al Pleno municipal de Arrecife sendas propuestas relativas a las casas de apuestas, y su proliferación en los barrios, y a la prevención de la ludopatía entre la población más joven del municipio. Sin embargo, el grupo de gobierno de Astrid Pérez formado por PP, PSOE y Nueva Canarias, rechazó aprobarlas.
Los municipalistas lamentan que el gobierno del ayuntamiento capitalino no quiera adoptar medidas para prevenir la ludopatía entre la juventud ni aumentar la distancia mínima de los locales de apuestas con respecto a los centros educativos, tal y como solicitaron los concejales de Lanzarote En Pie, entre otras propuestas.
“El Ayuntamiento debe utilizar todas las herramientas que tenga en sus competencias para proteger a la juventud del municipio e intentar prevenir la ludopatía. No entendemos que se haya rechazado esta propuesta”, afirmó Leandro Delgado, coportavoz del grupo municipal en Arrecife.
La proliferación de locales de apuestas en el municipio de Arrecife es una realidad que ha irrumpido en el paisaje urbano. Es común ver este tipo de locales en los barrios o cercanos a zonas de afluencia de menores, cuya publicidad, como reclamo visible en sus fachadas, está relacionada con el deporte. Una de las propuestas de Lanzarote En Pie, solicitaba elaborar un informe que analizara la posibilidad de establecer limitaciones a la publicidad exterior de los locales y espacios de apuestas externas.
Para Lanzarote En Pie, no es casualidad que estos locales se establezcan en los barrios, responde a un plan de marketing que tiene como objetivo la población más vulnerable, es en los barrios de la periferia donde la necesidad económica y el desempleo es más elevado.
No se puede mirar hacia otro lado
El grupo de gobierno del Ayuntamiento de Arrecife también rechazó la propuesta de Lanzarote En Pie para elaborar un informe sobre los locales de apuestas situados en el municipio para conocer la cantidad y dónde están situados, sobre todo saber si están próximos a centros educativos, zonas de ocio y afluencia juvenil o de atención al menor.
“Este rechazo nos hace pensar que no se quiere conocer la realidad y se prefiere mirar para otro lado ante un fenómeno que puede convertirse en un problema social, ya que la ludopatía no solo afecta a quien la sufre sino que, como otras adicciones, tiene sus consecuencias en el entorno familiar y en la sociedad”, sostiene Leandro Delgado.
Asimismo, se solicitó al gobierno municipal que se aumentaran las inspecciones de competencia municipal sobre estos locales para comprobar que seguían la normativa de apertura y cierre, constatar que se cumple con la prohibición de presencia de menores o si la actividad que realiza se corresponde con la licencia de apertura solicitada. Algo que tampoco fue aceptado, alegando que esas competencias eran del Gobierno de Canarias.
“Es algo incomprensible, vuelven a echar balones fuera para no asumir compromisos ni responsabilidades. Los Decretos 134/2006 y el 98/2014 disponen que la distancia entre un local de apuestas y un centro educativo o de atención al menor vendrá determinado por lo que establezca cada ayuntamiento en los planes de ordenación urbana y en las ordenanzas técnicas de edificación. Prefieren mirar para otro lado.”, concluyó Leandro Delgado.